Anuncia que estás esperando un bebé y prepárate para recibir consejos. Mucho. Muchos de ellos serán consejos no solicitados. Todo el mundo tiene una opinión sobre la paternidad. ¡Preparare!
Debes decidir qué consejos escuchar y cuáles ignorar. Debes decidir a quién escuchar y a quién ignorar. Como psicóloga infantil y madre de cuatro hijos, aquí están los 12 consejos que creo firmemente que todos los padres deberían conocer.
1. El Padre Perfecto No Existe
Este es probablemente el consejo más importante para padres primerizos. Todos llegamos a la crianza de los hijos pensando que seremos los padres perfectos. Una mezcla entre Mary Poppins y Maria Von Trapp. Pero la realidad es que el padre perfecto no existe. Todos fallamos alguna vez aunque adoremos a nuestros hijos. Cuanto antes lo aceptemos, mejor podremos afrontar la crianza de los hijos. En lugar de intentar ser el padre perfecto, adopta el enfoque de crianza suficientemente buena (1). Este enfoque fue citado por primera vez por el psicólogo Donald Winnicott. Significa aceptar que todos cometemos errores y que no pasa nda. No olvides que la paternidad perfecta es enemiga de la buena paternidad. Los niños no necesitan que seamos mártires.
2. Cambiarás. Y Mucho!
Convertirse en padre es una experiencia profundamente transformadora. Tu cuerpo cambia, tu identidad cambia, tus prioridades cambian, tu relación cambia… Sin embargo, existe una presión para recuperarse. Para volver a nuestro antiguo yo. Y rápido. ¿Pero por qué? ¿Por qué necesitamos volver a nuestro antiguo yo si somos totalmente diferentes? Deshazte de la presión de recuperarte y, en cambio, abraza y acepta esta nueva etapa de tu vida. Este proceso se llama “matrescencia” (2) y fue citado por primera vez a mediados de la década de 1970 por la antropóloga Dana Raphael.
3. No Te Compares con los Demás
Está en nuestra naturaleza compararnos con los demás. Este fenómeno se llama comparación social (3). Sin embargo, eso no significa que por ser “normal” sea necesariamente bueno para nosotros. La comparación social para los nuevos padres puede ser particularmente mala. Si te comparas con otros padres pensando que lo hacen mejor que tú, que pueden arreglárselas mejor que tú, que sus hijos se portan mejor que los tuyos o que sus casas están mejor organizados que la tuya, es hora de parar. Trata de concentrarte en tí y tu hijo. Ignora todo y a todos los que no te apoyan. Es mejor ignorar Instagram con todas esas imágenes perfectamente seleccionadas de familias perfectas con bebés perfectos en casas perfectas.
4. La Gente Rara Vez Dice la Verdad sobre su Experiencia de la Paternidad
A la mayoría de los padres no les encanta cada momento de la crianza de los hijos (4). Quieren muchísimo a sus hijos, pero pueden odiar jugar con ellos, llevarlos al parque puede resultar increíblemente aburrido o pueden encontrar la hora de dormir profundamente agotadora. Si te sientes así, no pasa nada. Eso no te convierte en un mal padre. Te convierte en un ser humano. Cualquier cosa que sientas con respecto a tus hijos, está totalmente bien. Lo que puede ser un problema es lo que haces con esos sentimientos. Sentir enfado hacia tu hijo no es un problema. Lo que sí es un problema es pegarle a tu hijo cuando te enfadas. Cualquiera que sea el momento por el que estés pasando, te puedo asegurar que la mayoría de la gente lo ha experimentado. Sólo porque la gente no hable de ello no significa que no lo sienta.
5. Cria el Hijo que Tienes, No el que Te Hubiera Gustado Tener
Mientras estamos en el proceso de convertirnos en padres, «soñamos» con el hijo que tendremos. Dependiendo de tus valores y objetivos, puedes soñar (5) con un niño deportista, un niño académico o un niño muy musical. Sin embargo, es posible que tengas un hijo totalmente diferente. A veces puede resultar difícil aceptarlo. Date cuenta de que tu hijo es su propia persona y acéptalo tal como es.
6. Necesitas tu Tribu
La crianza de los hijos nunca estuvo destinada a realizarse solos. Ser padre solo (6) es difícil. Muy duro. Hay tantos padres que se sienten solos hoy en día que parece que la soledad es una parte inherente de la paternidad. Pero esto es mentira. El problema es que hemos creado una sociedad que no facilita las relaciones humanas y no apoya a los padres ni a sus hijos. Si te sientes solo, intenta encontrar a tu tribu en la puerta del colegio, el trabajo, el parque, las actividades extracurriculares, los grupos de voluntariado o tu lugar de oración. Sé que puede ser difícil pero vale la pena intentarlo. Si quieres aprender más sobre este tema, te recomiendo leer «Platónico: Cómo la ciencia del apego puede hacerte hacer y conservar amigos» de la Dra. Marisa G. Franco.
7. Parece Lento Pero Pasa Muy Rápid.
Cuando era madre de cuatro niños pequeños, recuerdo que la gente me decía: “Aprovéchalo porque pasa muy rápido”. Tuve momentos en los que lo único que podía pensar era: «¿¿Tan rápido??? ¡¡¡¡¡Ojalá!!!!». Algunos días parecían interminables y todos igual. Con el paso de los años entendí que los días pasan muuuy lentos, pero los años pasan muy rápido. Mis hijos ahora son adolescentes. Si bien me encanta la etapa en la que nos encontramos, echo de menos muchas cosas de aquellos primeros días y años con ellos.
8. Sé el Padre
La mayoría de los padres hoy en día quieren estar cerca de sus hijos. Esto es brillante porque sabemos que cuando los niños tienen una relación cálida con sus padres, les suele ir mejor. Pero algunos padres confunden estar cerca de sus hijos con ser sus amigos. Recuerda que no eres el amigo de tu hijo. Es de esperar que su hijo tenga muchos amigos a lo largo de su vida, pero necesita un padre. Necesitan que seas el padre. Necesitan que establezcas una rutina, límites y expectativas claras. Necesitan que les regañes cuando hacen algo mal y que les guíes por la vida. Necesitan que los quieras incondicionalmente. Puedes estar cerca de su hijo y seguir actuando como padre.
9. Criar un Hijo No Es un Trabajo Sino una Relación
Cuando hablamos de paternidad, muchas veces nos centramos en las cosas que hacemos: cómo hacer que nuestro bebé duerma, cómo evitar que nuestros hijos peleen, cómo apoyar a nuestro hijo para que le vaya bien en el colegio… Pero no olvidemos que, por encima de todo, la paternidad es una relación. Una relación entre un padre y un hijo. Lo más importante para el desarrollo de un niño es tener una relación segura, afectuosa, estable y amorosa con sus padres o cuidadores. Centrémonos en esto. Esto es lo que importa.
10. Tu Trabajo No Es Hacer Feliz a tu Hijo
Tu trabajo como padre es brindarle a su hijo las herramientas para manejar cualquier situación que la vida le depare. Si nuestro objetivo es hacer felices a nuestros hijos, implícitamente les estamos diciendo que sólo pueden ser felices. Que se espera que sean felices. Que tener cualquier otra emoción no es aceptable. Enseñemos a nuestros hijos que la vida no siempre es fácil y que habrá muchos momentos en los que no serán felices y eso está bien. Centrémonos en criar niños emocionalmente competentes en lugar de centrarnos en criar niños felices. Puedes leer más sobre este tema aquí.
11. No te Dejes Engañar por la Industria de la Crianza
La industria de la crianza representa más de un billón de dólares en el mercado sólo en Estados Unidos. Esto significa que hay muchas empresas que intentan venderte cosas. Cosas que necesitas y otras muchas que no. Desde elevadores, tronas, juguetes para bebés, cochecitos, parques y máquinas de ruido blanco, hasta libros para bebés, expertos en sueño y asesores en lactancia. Asegúrate que piensas detenidamente en los productos que compras, los expertos que escuchas y las pautas que sigues. Si quieres leer más sobre este tema, este artículo te resultará útil.
12. El Conocimiento Es Poder
Muchos padres me dicen: «¡Ojalá hubiera sabido eso antes!». Y la verdad es que las investigaciones muestran que cuando los padres tienen información sobre el desarrollo infantil y la crianza de los hijos, disfrutan más de la crianza y se sienten más seguros. Trata de aprender sobre desarrollo infantil. Al hacer esto, podrás comprender mejor a tu hijo. Podrás ajustar tus expectativas sobre lo que tu hijo puede y no puede hacer dependiendo de la etapa de desarrollo en la que se encuentre. Esto te permitirá tomar decisiones que no solo afectarán a su hijo sino también a tus finanzas. Por ejemplo: «¿Necesito realmente una máquina de ruido blanco?» o «¿Debería contratar a un asesor en lactancia?«. Sin embargo, recuerda no exagerar. Demasiada información (7) puede hacerte sentir abrumado y confundido. Elije algunos expertos en los que confíes y que compartan tus valores.
Sabemos que ser padre no es fácil. Implica muchas emociones, planificación, recursos, estrés, felicidad, preocupación… ¡Y mucho más! Todos queremos hacer lo mejor para nuestros hijos pero a veces es difícil saber qué es lo mejor y cómo lograrlo.
Por eso creé REC Parenting. Para que puedas consultar cualquier duda que tengas, sabiendo que contamos con la información más reciente 100% basada en ciencia. Sabiendo que contamos con los mejores expertos cualificados. Sabiendo que, ya tengas alguna pregunta sobre la crianza de los hijos aquí y allá o si necesitas apoyo a largo plazo, estamos aquí para ayudarte.
Si aún no eres miembro de REC Parenting, únete a nosotros. Si solo quieres una sesión para tratar algún tema concreto que tengas, ponte en contacto conmigo. Estamos aquí para ti. Sin juzgarte y sin agenda.
Un abrazo,
Ana
Referencias
(1) Ramaekers, S., Suissa, J. (2012). Good Enough Parenting?. In: The Claims of Parenting. Contemporary Philosophies and Theories in Education, vol 4. Springer, Dordrecht. https://doi.org/10.1007/978-94-007-2251-4_4
(2) Orchard, E. R., Rutherford, H. J., Holmes, A. J., & Jamadar, S. D. (2023). Matrescence: lifetime impact of motherhood on cognition and the brain. Trends in cognitive sciences, 27(3), 302-316.https://doi.org/10.1016/j.tics.2022.12.002
(3) Suls, J., Martin, R., & Wheeler, L. (2002). Social comparison: Why, with whom, and with what effect?. Current directions in psychological science, 11(5), 159-163.https://doi.org/10.1111/1467-8721.00191
(4) Featherstone, B., & Hollway, W. (Eds.). (2002). Mothering and ambivalence. Routledge.
(5) Cichy, K. E., Lefkowitz, E. S., Davis, E. M., & Fingerman, K. L. (2013). “You are such a disappointment!”: Negative emotions and parents’ perceptions of adult children’s lack of success. Journals of Gerontology Series B: Psychological Sciences and Social Sciences, 68(6), 893-901.
(6) Nowland, R., Thomson, G., McNally, L., Smith, T., & Whittaker, K. (2021). Experiencing loneliness in parenthood: a scoping review. Perspectives in public health, 141(4), 214-225. https://doi.org/10.1177/17579139211018243
(7) Glatz, T., & Lippold, M. A. (2023). Is more information always better? Associations among parents’ online information searching, information overload, and self-efficacy. International Journal of Behavioral Development, 47(5), 444-453. https://doi.org/10.1177/01650254231190883
Hay mucho ruido en el ámbito de la crianza de los hijos. Muchos expertos, muchas tendencias, muchos influencers, muchos guiones, muchos consejos y muchos consejos. Hay psicólogos, consultores, expertos, consejeros e influencers… Todo esto hace que sea muy difícil saber en quién confiar y qué consejo seguir.
A continuación, te ofrecemos algunos consejos que pueden resultarle útiles a la hora de decidir en quién confiar:
1. Verifica Sus Credenciales
Cuando busques consejos sobre crianza, confía en psicólogos del desarrollo, psicólogos infantiles, psicólogos clínicos, psicólogos educativos, y coaches calificados. Si tú o tu hijo estáis recibiendo algún tipo de terapia, asegúrate de que el profesional al que acudís esté acreditado por un organismo regulador. Esto depende de su campo específico. Si vives en el Reino Unido, siempre es una buena idea comprobar que los profesionales estén acreditados por la Asociación Británica de Asesoramiento y Psicoterapia (BACP), el Consejo de Psicoterapia del Reino Unido (UKCP) o el Consejo de Profesiones de la Salud y el Cuidado (hcpc). Ten en cuenta que algunas áreas dentro del campo de la crianza no están reguladas. Por ejemplo, cualquiera puede llamarse experto en sueño. Las doulas tampoco están reguladas. También es una buena idea examinar la experiencia laboral de los expertos, los premios que pueden recibir y los reconocimientos. También es importante que los «expertos» se mantengan al día con las últimas investigaciones. Muchas organizaciones profesionales requieren cursos de actualización para asegurarse de que sus miembros se mantengan al día con las últimas investigaciones y te den consejos actualizados. Por ejemplo, cuando tuve a mi primer hijo hace 20 años, la recomendación era que los bebés durmieran de lado. Cuando tuve a mi hijo menor, la recomendación había cambiado a que los bebés durmieran boca arriba para reducir el riesgo de síndrome de muerte súbita infantil. Si mi pediatra no hubiera estado al día con las últimas investigaciones, no me habría enterado. Asegúrate de que la experiencia del experto sea relevante para el tema en cuestión. Por ejemplo, yo soy psicóloga del desarrollo, pero no podría aconsejarte sobre cuestiones relacionadas con la lactancia materna o el destete. Esos temas están fuera de mi ámbito de práctica. Para tratar esos temas, te recomendaría que consultes a un asesor de lactancia. Ten cuidado con las personas que actúan como si fueran expertas en todo. El campo de la crianza es amplio y nadie sabe absolutamente todo.
2. No Te Fíes de Expertos que Hablan en Absolutos
No confíes en los expertos que hablan con absoluta certeza: las absolutas son excelentes para crear titulares que llaman la atención. Las afirmaciones absolutas nos hacen sentir seguros. Pero no es así como funciona la ciencia. La ciencia es compleja y está llena de matices. Ten cuidado con los «expertos» que hacen afirmaciones como: «Hacer x arruinará la vida de tu hijo», «Esto es lo que necesitas para asegurarte de que tu hijo sea el mejor en el colegio» o «Llevar a tu hijo a la guardería es malo«.
Ahora bien, hay algunas cosas sobre la crianza de los hijos que podemos decir con un 100 % de certeza. Podemos decir con certeza que nunca es bueno pegarle a un niño, que es muy importante tener una relación cálida con tu hijo o que todos los niños necesitan límites. Pero, en la mayoría de los casos, el campo de la crianza de los hijos es complejo y difícil de estudiar. Esto significa que, en su mayor parte, no podemos hablar en términos absolutos. Busca expertos que aborden los matices, admitan la incertidumbre y utilicen calificativos. Hacer esto hará que sus afirmaciones reciban menos «clicks» y sean menos»comerciales», pero es una señal de que puede confiar en ellos.
3. No confíes en Expertos que Basan Sus Consejos En Su Propia Experiencia
Puede que no sea una opinión popular, pero ser madre no te da las cualificaciones para dar consejos sobre crianza de los hijos. De la misma manera que saber conducir no me cualifica para ser profesora de autoescuela. Ser madre te califica para decir lo que te funcionó a ti, pero no califica a nadie para dar consejos.
4. No Obtengas Todos tus Consejos de Crianza en las Redes Sociales
Hay muy buenas cuentas de redes sociales que brindan excelentes consejos e información sobre crianza, pero también hay cuentas que brindan consejos realmente malos y, a veces, incluso peligrosos. Muchos consejos que brindan los influencers y los creadores de contenido no se basan en la ciencia y, a veces, incluso cuando se basan en la ciencia, no se informan correctamente. Asegúrate de seguir a profesionales y medios de comunicación de buena reputación. Verifica sus credenciales, sus fuentes y siempre verifica sus afirmaciones.
5. No Confíes en Expertos que «Infunden Miedo»:
Hay muchos expertos en crianza que hacen un trabajo fantástico y tienen una verdadera pasión por ayudar a los padres. Sin embargo, otros usan las preocupaciones y los miedos de los padres en su beneficio para venderles productos que los padres realmente no necesitan. Ten cuidado con los expertos que generan miedo y preocupación. Como padres sentimos suficiente presión, preocupación, culpa y juicio, no necesitamos expertos que nos hagan sentir peor.
6. Ten Claro Cuanto Influyen Realmente los Padre sobre los Hijos
Nos han hecho creer que, como padres, cada decisión que tomamos puede arruinar a nuestros hijos. Esto no es cierto. Es seguro decir que el desarrollo a largo plazo de nuestros hijos no se verá afectado significativamente por las apps educativas con las que juegan, el momento en que aprenden a usar e orinal o si usan chupete o no. Lo que más importa para el desarrollo de nuestros hijos es tener una relación cálida, amorosa, segura, estable y constante con sus padres. Por lo tanto, ignora los consejos para padres que realmente no importan y concéntrate en los consejos que te ayuden a desarrollar un vínculo fuerte con tu hijo. Si, por ejemplo, tienes dificultades para controlar su ira, para establecer límites con tus hijos, o si tienes problemas para establecer una rutina clara para ellos, definitivamente vale la pena buscar asesoramiento y apoyo. Porque esas cosas son importantes para su hijo. Preocuparse por los métodos de destete o si debe dormir con él o no, realmente no tiene mucho sentido porque no hará una gran diferencia para sus hijos.
Espero que esta información te resulte útil. En REC Parenting nos centramos en ofrecerte consejos e información que sean importantes para tí y tu hijo. Ignoramos los consejos que simplemente no son importantes porque nuestro objetivo es hacer que tu vida sea más fácil y no más complicada. Si tienes problemas con tu salud mental, como establecer límites, si te sientes agotada…. Estamos aquí para ayudarte. Pónte en contacto con nosotros y programaremos una sesión individual para analizar tus necesidades.
Un abrazo,
Ana
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