El estilo de crianza autoritario es, junto con el democrático, el permisivo y el negligente, uno de los cuatro estilos de crianza tradicionales. Estos cuatro estilos de crianza fueron citados por primera vez por los psicólogos Baumrid, Maccoby y Martin, después de observar a miles de padres e hijos.
La crianza democrática es el estándar de oro de la crianza. En contraste, la crianza autoritaria, permisiva y negligente no son tan buenas para los niños.
Echemos un vistazo a la crianza autoritaria y cómo influye en el desarrollo de los niños.
Crianza Autoritaria
Los padres autoritarios (1) son fríos y exigentes. Los padres esperan que sus hijos hagan lo que se les dice. Siempre se espera un buen comportamiento. Las reglas son estrictas, no negociables y no se explican claramente. No fomentan la intimidad ni la confianza. No se tienen en cuenta las opiniones y los deseos de los niños.
Cuando los padres autoritarios disciplinan (2) a sus hijos, no les explican por qué su comportamiento es incorrecto. Utilizan castigos y pueden llegar a ser físicos. Suelen ser duros y coercitivos. Los padres pueden decirles a sus hijos que ya no los querrán si se portan mal.
Los Niños Criados por Padres Autoritarios Tienen Más Probabilidades de:
- Tener problemas de salud mental, como depresión y ansiedad.
- Tener baja autoestima.
- Tener pocas habilidades sociales.
- Mostrar problemas de conducta.
- Ir mal en el colegio.
- Ser hostil y rebelde con sus padres. (3)
Cómo Saber Si Eres Autoritario?
Eres autoritario si tiendes a:
- Gritarle a tu hijo cuando se porta mal.
- Agarrar a tu hijo cuando es desobediente.
- Regañar y criticar a tu hijo cuando su comportamiento no cumple con tus expectativas.
- Decir algo como «Porque yo lo digo» o «Soy tu padre y quiero que lo hagas«, cuando tu hijo desafía una regla.
- Castigar a tu hijo quitándole privilegios (por ejemplo, «¡No puedes tener tu teléfono durante una semana!») con poca o ninguna explicación.
- No permitir que tu hijo tenga ni voz ni voto sobre las reglas familiares.
Me Identifico con Muchas de las Cosas que Acabas de Mencionar. ¿Cuál Es el Problema?
Si eres frío con tu hijo, no se sentirá querido. Incluso puede sentirse rechazado. Es importante que los niños se sientan queridos por sus padres. Esto les ayuda a desarrollar un sentido de autoestima, pertenencia y seguridad (4).
Muchos padres dicen: «Es mi trabajo ser duro con mi hijo, pero él sabe que le quiero». No hay duda de que los padres autoritarios quieren a sus hijos. Pero como padres debemos darnos cuenta de que no es suficiente que los queridos. Ellos deben sentirse queridos. No importa que te veas a ti mismo como un padre amoroso si tu hijo no siente lo mismo.
El segundo problema con los padres autoritarios es que no escuchan a sus hijos. No tienen en cuenta sus sentimientos y opiniones. Por lo tanto, los niños no se sienten escuchados. Se sienten ignorados. Su autoestima puede verse afectada porque el mensaje que reciben es que no son dignos de ser escuchados.
No digo que siempre debamos seguir las opiniones de nuestros hijos. Las familias son una jerarquía, donde los padres son los que mandan. Pero es importante que nuestros hijos se sientan valorados y escuchados.
Soy un Padre Autoritario Pero Me Gustaría Ser Más Democrático. ¿Qué Puedo Hacer?
La buena noticia es que podemos cambiar y mejorar la forma en que criamos a nuestros hijos. No es fácil, pero se puede hacer. Aquí hay algunos consejos:
- Intenta ser más democrático: cuanto más democrático puedas ser, mejor para tu hijo. Los padres democráticos son cálidos y receptivos. Fomentan la confianza y la intimidad. Establecen expectativas altas y reglas claras. Tienen en cuenta las opiniones y los sentimientos de sus hijos. A su vez, los niños suelen ir bien en todos los aspectos de la vida (5).
- Cambia tu estilo de disciplina: en lugar de gritar y usar castigos severos, intenta usar consecuencias lógicas (6). Estas son consecuencias que abordan directamente el comportamiento que el niño debe cambiar o dejar de hacer. Por ejemplo, si tu hijo deja su bicicleta en medio de la entrada, la bicicleta se guarda durante una hora. Si tu hijo nunca pone la ropa sucia en el cesto, su ropa no se lavará a menos que esté en el cesto. Este enfoque funciona mucho mejor que aplicar castigos aleatorios y sin relación.
- Sé consciente de tus emociones: muy a menudo, cuando nos enfadamos con nuestros hijos es porque hemos perdido el control. Comprende cuáles son sus desencadenantes, para que puedas controlar cómo responde a su hijo. Enfadarte con tu hijo no es un problema. El problema puede ser lo que hacemos con ese enfado.
- Reflexiona sobre cómo fuiste criado: ¿Tus padres fueron muy duros? ¿Usaron castigos corporales? ¿Te sentiste escuchado? Considera cómo te hizo sentir cuando eras niño y si deseas criar a tu hijo en un entorno similar o si quieres cambiar.
- En lugar de intentar cambiar todo al mismo tiempo, concéntrate en cambiar comportamientos específicos.
- Buscar asesoramiento profesional puede ser una buena idea. En REC Parenting tenemos un equipo de expertos en crianza, listos para apoyarte a tí y a tu familia. ¡Ponte en contacto con nosotros! Nunca es demasiado tarde para convertirse en el padre que quieres ser.
Sin Embargo, Ten en Cuenta que el Término «Autoritario» No Significa lo Mismo en Todas las Culturas.
La crianza de los hijos está influenciada por la cultura en la que vivimos. La crianza autoritaria es más común en culturas no occidentales y en minorías étnicas que viven en países occidentales.
¿Por qué? Porque algunos países no occidentales son colectivistas. Las culturas colectivistas consideran que el grupo es más importante que el individuo. Un estilo de crianza autoritario parece funcionar mejor para lograr que los niños se ajusten a valores como la conformidad, el autocontrol y la humildad, que son muy importantes en los países colectivistas.
Los padres en estas culturas pueden usar la culpa, la vergüenza y los regaños para disciplinar a sus hijos. Pero, al contrario de lo que sucede en el mundo occidental, estas prácticas no están vinculadas con resultados negativos para los niños (7).
Finalmente…
La crianza autoritaria no es lo mejor para nuestros hijos. Si este es tu estilo, no pierdas la esperanza. Nunca es demasiado tarde para ser más democrático. Puedes lograrlo con apoyo y perseverancia. En REC Parenting estamos aquí para ayudarte.
Y recuerda, el padre perfecto no existe. Como padres, debemos intentar acertar la mayoría de las veces.
Un abrazo,
Ana
Referencias
- Camisasca, E., Miragoli, S., Di Blasio, P., & Feinberg, M. (2022). Pathways among negative co-parenting, parenting stress, authoritarian parenting style, and child adjustment: The Emotional Dysregulation Driven Model. Journal of Child and Family Studies, 31(11), 3085–3096. https://doi.org/10.1007/s10826-022-02408-9
- Carroll, P. (2021). Effectiveness of positive discipline parenting program on parenting style, and child adaptive behavior. Child Psychiatry & Human Development, 53(6), 1349–1358. https://doi.org/10.1007/s10578-021-01201-x
- Smetana, J. G. (2017a). Current research on parenting styles, dimensions, and beliefs. Current Opinion in Psychology, 15, 19–25. https://doi.org/10.1016/j.copsyc.2017.02.012
- Smetana, J. G. (1994). Parenting styles and beliefs about Parental Authority. New Directions for Child and Adolescent Development, 1994(66), 21–36. https://doi.org/10.1002/cd.23219946604
- Lavrič, M., & Naterer, A. (2020). The power of authoritative parenting: A cross-national study of effects of exposure to different parenting styles on Life Satisfaction. Children and Youth Services Review, 116, 105274. https://doi.org/10.1016/j.childyouth.2020.105274
- Robichaud, J.-M., Mageau, G. A., Soenens, B., Mabbe, E., Kil, H., Frenette, J., & Roy, M. (2024). Should parents combine reasoning with firm control to nurture adolescent socialization? comparing logical consequences with mild punishments. Canadian Journal of Behavioural Science / Revue Canadienne Des Sciences Du Comportement. https://doi.org/10.1037/cbs0000409
- Chao, R. K. (1994). Beyond Parental Control and authoritarian parenting style: Understanding Chinese parenting through the cultural notion of training. Child Development, 65(4), 1111–1119. https://doi.org/10.1111/j.1467-8624.1994.tb00806.x
Los cuatro estilos principales de crianza: democrática, autoritaria, permisiva y negligente. ¿Cuál es el tuyo?
Los psicólogos Baumrid, Maccoby y Martin evaluaron a miles de padres e hijos en dos dimensiones: calidez y exigencia. Basándose en esas dos dimensiones, concluyeron que cada padre se enmarca en uno de los cuatro estilos principales de crianza. ¿Por qué son importantes los estilos de crianza? Porque juegan un papel en el desarrollo de los niños.
Vamos a explicar cada uno de ellos para que puedas decidir qué tipo de padre eres.
Crianza Democrática
Estos padres son cariñosos, atentos y cálidos. Fomentan la confianza y la intimidad. Establecen altas expectativas y reglas claras. Los niños entienden esas reglas y cuáles son las consecuencias cuando las rompen. Los padres toman en consideración las opiniones y sentimientos de sus hijos. Los niños se sienten seguros y protegidos porque sus padres son coherentes y establecen rutinas claras.
¿Cómo influye la crianza autoritaria en los niños?
Los hijos de padres autoritarios son los que obtienen mejores resultados. Estos niños tienden a:
- Estar bien adaptados
- Tener buenas habilidades sociales
- Desempeñarse bien en el colegio
- Tener una alta autoestima
Cientos de estudios muestran que la crianza democrática puede considerarse el estándar de oro de la crianza
Crianza Autoritaria
Estos padres son exigentes y fríos. Esperan que sus hijos hagan lo que se les dice. Establecen reglas estrictas y tienden a ser inflexibles y rígidos. No fomentan la intimidad ni la confianza. Los padres esperan que los niños hagan lo que se les dice.
Cuando disciplinan a sus hijos, son duros, usan castigos y pueden llegar a ser físicos. No le explican al niño por qué su comportamiento fue incorrecto.
¿Cómo influye la crianza autoritaria en los niños? Estos niños son más propensos a:
- Tener malas relaciones sociales
- Tener problemas de salud mental como ansiedad y depresión
- Desempeño deficiente en el colegio
- Tener menor autoestima
Crianza Permisiva
Estos padres son cálidos y receptivos, pero no esperan mucho de sus hijos. Proporcionan poca orientación y dirección. Quieren agradar a sus hijos, por lo que evitan los conflictos.
No establecen límites claros. No son constantes en su disciplina. Un día pueden castigar a su hijo por no hacer la cama y al día siguiente, el mismo comportamiento puede pasar desapercibido.
¿Cómo influyen los padres permisivos en sus hijos? Estos niños son:
- Más propensos a tener problemas emocionales y de conducta
- Menos propensos a tener un buen desempeño escolar
- Más propensos a tener problemas de autorregulación
Crianza Negligente (También Llamada Crianza Desinteresada):
Estos padres no son exigentes ni responden a las necesidades de sus hijos. Simplemente no están interesados en la vida de sus hijos. No establecen expectativas, ni ofrecen orientación, apoyo o supervisión. Ofrecen refugio y comida, pero eso es todo.
No disciplinan a sus hijos.
¿Cómo influye la crianza negligente en los niños? Estos niños tienen más probabilidades de:
- Tener dificultades en el colegio
- Carecer de autorregulación
- Consumir drogas y alcohol
- Incurrir en delincuencia y comportamiento antisocial
- Los hijos de padres negligentes son los que están en peor situación.
Déjenme decir algo antes de continuar. Quizás hayan notado que uso las palabras “tienden a” o “es probable” con bastante frecuencia. Esto se debe a que la investigación en psicología del desarrollo no puede decir al 100% que algo sucederá, puede decir que es probable que algo suceda. Tomemos el ejemplo de la crianza negligente. Los estudios muestran que los hijos de padres negligentes tienen muchas probabilidades de tener un mal desempeño en la vida. ¿Significa esto que a todos los niños desatendidos les irá mal? No. Hay niños desatendidos a los que les va bien. No podemos decir categóricamente que todos los niños desatendidos tendrán dificultades, solo podemos decir que los niños desatendidos tienen más probabilidades de tener dificultades.
Ahora, Respondamos Algunas Preguntas que los Padres Suelen Hacer Sobre este Tema.
¿Qué Hay de Otros Estilos de Crianza de los Que He Oído Hablar?
¡Quizás haya oído hablar de la crianza suave, la crianza helicóptero, la crianza con apego, la crianza relajada, la crianza reflexiva, la crianza natural y muchos otros!
La realidad es que la mayoría de estos estilos de crianza circulan en las redes sociales y la prensa, pero no hay mucha (o ninguna) investigación científica que los respalde.
Hay algunas investigaciones sobre la crianza intensiva (o crianza helicóptero) que sugieren que está relacionada con resultados negativos para los niños.
¿Siempre Tengo el Mismo Estilo de Crianza?
No. Tu estilo de crianza puede cambiar dependiendo de lo que esté sucediendo en tu vida. Por ejemplo, cuando los padres están estresados, tal vez porque están pasando por un divorcio o han sido despedidos del trabajo, suelen ser más duros con sus hijos. Por lo tanto, un padre que suele ser autoritario puede volverse autoritario. Sé consciente de lo que está sucediendo en tu vida para entender cómo te estás comportando con tus hijos.
Muchos padres no encajan bien en una categoría. Pueden ser, por ejemplo, mayormente permisivos con un poco de negligencia. Como en todo en la vida, ¡hay muchos matices de gris en la crianza de los hijos!
¿Tengo el Mismo Estilo de Crianza con Todos Mis Hijos?
No. Es posible que tengas diferentes estilos de crianza con cada uno de tus hijos. Esto sucede porque los padres influyen en sus hijos, pero los hijos también influyen en sus padres. La crianza es una vía de doble sentido. Imagina que tienes un hijo que siempre es feliz, cariñoso y tranquilo. Es probable que seas autoritario con él. Ahora, imagina que tu otro hijo siempre ha sido difícil, está de mal humor y es distante. Es probable que seas más autoritario con él.
Esto no significa que amemos a un hijo más que al otro. Significa que son personas diferentes y reaccionamos de manera diferente ante ellos.
¿Puedo Cambiar mi Estilo de Crianza?
Sí. Los estilos de crianza se pueden cambiar. Existen estudios llamados «intervenciones de crianza» donde se les enseña a los padres a convertirse en «mejores» padres. Tengo buenas noticias:
Los padres pueden cambiar y de hecho cambian la forma de ser padres
Cuando los padres se vuelven «mejores» en la crianza, sus hijos lo hacen mejor
Con el apoyo y el compromiso adecuados, podemos convertirnos en los padres que queremos ser la mayoría de las veces. Recuerde que el padre perfecto no existe y nuestros hijos no necesitan un padre perfecto. Lo que necesitan es que hagamos las cosas bien la mayor parte del tiempo.
¿Qué Pasa si mi Pareja Tiene un Estilo de Crianza y Yo Tengo Otro?
Este es un problema común, pero no hay mucha investigación al respecto. La situación ideal es aquella en la que ambos padres (o al menos uno) tienen autoridad.
Si tienes dos estilos de crianza diferentes, recuerda que tú y tu pareja queréis lo mejor para tu hijo, incluso si no estáis de acuerdo sobre qué es «lo mejor». Intenta encontrar puntos en común.
¿La Cultura Influye en los Estilos de Crianza?
¡Si, y mucho! Criamos a nuestros hijos para que encajen en la sociedad en la que vivimos. Diferentes sociedades tienen diferentes valores, creencias y tradiciones, por lo que la crianza no es la misma en todas las culturas.
La crianza autoritaria es más común en los países occidentales. Por el contrario, en los países colectivistas los padres tienden a ser más autoritarios.
¿Qué Hay de los Estilos de Crianza para Padres de Niños Neurodivergentes?
Como todos los niños, los niños neurodivergentes se benefician de padres democráticos. Sin embargo, a estos padres puede resultarles más difícil ser cálidos y receptivos con sus hijos porque criar niños neurodivergentes conlleva sus propios desafíos.
Es particularmente importante que los padres que crían niños neurodivergentes se cuiden a sí mismos y encuentren un sistema de apoyo.
Mensaje Final
Como padres, estamos inundados de consejos y recomendaciones. Solo recuerda una cosa: intenta ser un padre democrático tan a menudo como puedas. No siempre acertarás, y tampoco es el fin del mundo. Nuestros hijos no necesitan que acertemos todo el tiempo. Necesitan que acertemos la mayoría de las veces. Eso es todo.
Espero que este artículo te resulte útil. Como siempre, si tienes alguna pregunta o comentario, no dudes en contactarnos.
Un abrazo,
Ana